Se acercan las vacaciones de invierno, un momento muy esperado por los niños y jóvenes, pero un gran estrés para los padres. ¿Qué hacemos?, ¿Cómo los entretenemos? Son algunas de las preguntas clásicas que no ayudan a manejar nuestro estrés, además que a estas alturas del año, todos estamos algo cansados y el tiempo no es un recurso que sobra.